lunes, 29 de junio de 2015

Seré lo que yo quiera.

Te eché muchísimos de menos, pero puse todas mis fuerzas en olvidarte. Estaba destrozada. No sabía que hacer. A veces deseaba ser el clima para que hablaras de mi por siempre y cuando lloviera ser el tema del día, otras veces deseaba ser una cerveza fría, y estar siempre entre tus manos y tu boca. Estaba garantizado ser todo lo que necesitabas. A veces deseaba una llamada o tan sólo unas bonitas palabras. Hubo dolor, mucho. Pero ninguna pena perdura por siempre, solo deseaba olvidarte, odiarte... Deseaba dejar de ser tan estúpida para ti... Y para mi. Deseaba ser yo y conseguir todo lo que me propusiera. Más tarde encontré mi lugar en el mundo, olvidándome de ti deje de tener miedo a ser yo misma, la soledad ya no me acompañaba vagando por el mundo, ya nadie me dice que cambie, ya no siento ese latido que creía amor, ese voleteo en el estomago desapareció hace mucho tiempo, la confianza volvió, desde entonces deseo ser yo, libre, sin miedos, buscando solo a alguien a mi lado que quiera cuidarme y no vivir el para siempre sino el presente, aventuras, risas, sueños cumplidos y amor.
Si vienes a llamarme rara, borde, loca... Solo decirte que así soy yo. Dejé de desear ser la cerveza de nadie, ahora deseo bebérmelas con quien sea, menos con personas contaminantes.
Sufrimos, pensamos, crecemos, aprendemos.


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