viernes, 31 de agosto de 2012

Nos volvemos a ver Septiembre.

Se acabaron las noches eternas de verano, el olor a mar, estar con tus amigos las 24 horas, perderte comidas y comer porquerías, se acabaron las berbenas de pueblo, fiestas y ferias, se acabaron los días de tumbarse en el sofá sin hacer nada, de acostarse a las 6 de la mañana y despertarse a la hora de comer, se acabaron los días de playa y piscina, se acabaron los vikinis, los shorts, las camisas que se ven el ombligo, se acabaron los 'no eres capaz' del grupo de amigas para hacer locuras, se acabó agosto y con ello el verano, pero empieza septiembre y con él el otoño.
Empieza la noche a las 8 de la tarde, empieza es olor a café por la mañana, empieza nuevas novedades con tus amigos, comer cosas calentitas, lentejas, pucheros, potajes, empieza fiestas internacionales, la navidad o la semana santa, empieza los días en los que piensas que no tienes suficientes horas para estudiarte el temario, pero aun así pierdes el tiempo, empieza los días de acostarse a las 12 de la noche y a las 6 de la mañana ser un zombie, empieza los días de frío y lluvia, de pasar tardes en teterías o en casa de amigos viendo una película, empieza las sudaderas, los pañuelos y los gorritos, empieza los 'no hay huevos' de tus compañeros de clase para hacer alguna gamberrada en la escuela, empieza la elección de un buen libro, cortarte esas puntas tan estropeadas del verano, empieza septiembre y con él el otoño, yo lo cogeré con ganas.
Deja de responder 'corto' cuando te pregunten del verano, la actitud no es esa.¿Por qué desanimarnos? Las cosas deben de acabar algún día. hemos tenido un largo y bonito verano, pero se nos hace pesado, y es que septiembre trae mil novedades para animarnos y hacernos olvidar, porque la vida es así de sabia. Porque ¿quién no echa de menos ver a sus compañeros de clase? estar con ellos 6 horas(a veces molesto), hacer nuevas acnedotas, el olor a café por la mañana, el sonido de la lluvia, la tierra mojada, las canciones melancólicas, las navidades con la familia, hasta las regañinas de los profesores.
Vale quizá haya cosas que no eche tanto de menos, como estudiar, no poder salir por las tardes, no tener suficientes horas, aquél profesor cabrón, aquel compañero que nos mira mal, esa primera hora de gimnasia, los lunes a primera hora historia...
Pero la vida sigue, pienso, creo y espero que este va a ser un buen año, que este va a ser ''El año''.