Esta noche no dormí hasta ver el amanecer, sueño tenía, imsónio también. Hoy es 1 de agosto. Ese día que tiene el mismo efecto que 1 de enero. Que te hace mirar atrás y darte cuenta que no has hecho nada de lo que tenías pensado, ese día gris, esa noche infeliz, esa madrugada en la que duelen las cicatrices, pensé en ti, y en mi también. Recordé tantos lindos recuerdos, que a veces se me escapaba alguna sonrisilla, y otras alguna que otra lágrima. Te quise, te quise mucho, y te quiero, te quiero y te aprecio. Ni te amo, ni te odio, ni me mereces la pena, ni me la das. Supongo que cuando este día llega significa que dejé todo estar, dejé cada recuerdo bonito grabado en mi corazón, y cada error en una enseñanza en mi vida. Es feo que dos personas después de tanto acaben como desconocidos, pero cuando alguien se va y sabes que no volverá, es cuando entiendes la verdad, el tiempo y la vida sin más. Porque no todo son bonitos recuerdos por mucho que quiera creer, y a veces se cometen errores, a veces dos personas no están destinadas a amarse.
Cuando el camino sea oscuro y solitario no hay que dejarse llevar por los bellos recuerdos y entrarse a la locura porque siempre hay una nueva luz cuando no puedes ver, y siempre hay un camino que no es retroceder. Si vengo a hacer reír, por favor, no me hagas llorar.
